Alice Hříbalová 434377 12. 5. 2020 Beatriz y los cuerpos celestes Beatriz y los cuerpos celestes es una novela escrita por Lucía Etxebarria, que ganó el premio Nadal de novela en 1998. Es la segunda novela de la autora y desarrolla varios temas que aparecen a lo largo de su camino literario: la adicción y las drogas, la sexualidad y sus dimensiones, las enfermedades mentales, el amor. Como es también habitual en los libros de Etxebarria, la protagonista es una mujer joven cuya expresión del género (por decirlo de alguna manera) no sigue los estereotipos y las normas tradicionales. Beatriz se siente desarraigada y volviendo al pasado en sus recuerdos está intentando encontrarse y entenderse a sí misma. Está cuestionando su propia identidad, su orientación sexual, sus relaciones con su familia y con las personas de su pasado. Sus recuerdos se nos presentan en un mosaico narrativo donde se mezclan con el presente y entre sí. La novela toma lugar en dos ciudades, Madrid y Edimburgo. Madrid representa el pasado de Beatriz, su niñez y adolescencia y su primer amor. Edimburgo representa el abandono de la adolescencia y el comienzo de la vida adulta de Beatriz. En el comienzo de la historia, Beatriz vuelve a Madrid como también vuelve a sus recuerdos a lo largo de la obra. Se enfatiza el contraste entre las dos ciudades: Madrid, la ciudad de las luces, representa el pasado que en la memoria de Beatriz fue más emocionante, más intenso, aunque también más triste que el presente gris en Edimburgo. Beatriz compara las dos mujeres en su vida de la misma manera: Mónica es la mujer que la apasiona, Cat es la mujer que la aburre. Como dice la frase cliché, Beatriz siempre quiere lo que no puede tener, lo que también resultará en una relación con un hombre que no la quiere. También hay que mencionar la analogía que se hace entre el amor y las relaciones humanas y el mundo celeste, pues a partir del título del libro se puede suponer que, para la autora, se trata de una parte que tiene mucha importancia en la novela. Si bien las metáforas celestes, algunas más originales, otras menos, dan un aire poético a la obra, algunas me parecían más bien ingenuas y sin función alguna en la novela. Por otro lado, la novela está bien escrita, en un lenguaje fluido y ligero, que si bien no es extraordinario, me ha parecido muy bonito. Para concluir, creo que si juzgamos la obra desde el punto de vista del género del coming of age, se trata de una novela muy buena, cuyos puntos fuertes están sobre todo en la capacidad de la autora de retratar los sentimientos, las dudas y los deseos de una mujer joven que todavía está aprendiendo quién es. Fuentes Etxebarria, Lucía. Beatriz y los cuerpos celestes. Barcelona: Ediciones Destino, 1998.