Alice Hříbalová 434377 18. 5. 2020 Tiempo de silencio y el realismo dialéctico Tiempo de silencio, una novela publicada en 1962 por la editorial Seix Barral, es la única novela completa de Luis Martín-Santos y, sin embargo, convirtió al autor en una de las figuras revolucionarias de la literatura española del siglo XX. La trama de la novela transcurre en Madrid de los años 40 y a través de un retrato de diversos ambientes y estratos sociales ofrece un desconcertante testimonio social sobre la vida en Madrid en los tiempos de la posguerra. Se trata de una obra heredera del realismo social con ciertos rasgos naturalistas y tremendistas, pero lo que realmente la hace destacar es su innovación formal. Para entender el aporte de la novela, hay que mencionar cuál es el contexto histórico en el que se sitúa. Durante los primeros años del franquismo, la literatura española sufrió una ruptura con las corrientes literarias de los años 20 y los años 30. Al mismo tiempo, las consecuencias sociales, culturales y económicas de la guerra civil y la censura por parte de la dictadura franquista resultaron en la división de la literatura: por una parte, los autores que simpatizaban con el nuevo régimen escribían obras en las que legitimaban la victoria del franquismo, por otra parte, muchos autores del bando de los vencidos optaron por el exilio y los que se quedaron en España se veían oprimidos y silenciados. Los dolorosos años de la violencia, la pobreza y la opresión dieron a nacer a varias obras que subrayan la angustia existencial y la fealdad de la época. Cabe mencionar, por ejemplo, la novela Nada de Carmen Laforet, publicada en 1945, o La colmena de Camilo José Cela, publicada en 1950. El enfoque de estas novelas está en el retrato crudo del periodo de la posguerra. Hemos señalado que Tiempo de silencio es una novela heredera del realismo social con rasgos naturalistas y tremendistas de las décadas anteriores, que, además, también retrata la sociedad española en la época de la posguerra. ¿En qué consiste su originalidad? Y, ¿se trata de un mero juego estético? Como señala Michael Ugarte en su artículo «Tiempo de Silencio and the Language of Displacement», la novela ofrece un retrato (y, a la vez, una dura crítica) de la vida en España durante el periodo de la posguerra, por tanto, se puede decir que pertenece al género del realismo o, como dicen algunos críticos, al género del «realismo dialéctico» (341). Este término, empleado por el mismo autor de la novela, es algo difícil de definir. Según Martín-Santos, para llegar a un realismo dialéctico «hay que pasar de la simple descripción estática de las enajenaciones para plantear la real dinámica de las contradicciones in actu» (Martín-Santos en Ugarte 343). Se trata, pues, de dotar el relato de un cierto dinamismo. Esta característica, no obstante, parece algo vaga y uno puede preguntarse por su validez a la hora de analizar la novela. ¿No es acaso que toda buena novela debe ser dinámica? Ugarte va tan lejos como para llamar el realismo dialéctico un «término sin sentido» (344). En cambio, otros críticos aceptaron la categoría sin más y han intentado desarrollar sus características. En su artículo «El realismo dialéctico de Luis Martín-Santos», José Lázaro analiza los ensayos inéditos de Martín-Santos y señala que el realismo dialéctico se refiere a «la función modificadora de la realidad» de la literatura, a la transformación que sucede en el lector cuando lee la obra (32). «Esta transformación individual del lector produce, de forma indirecta, una transformación social» (Lázaro 34). Ahora bien, si aceptamos que Tiempo de silencio es una novela realista y dinámica que se propone una transformación de la sociedad y, por tanto, podemos decir que se trata de una novela social, nos encontramos con dos paradojas. Por una parte, la novela toma lugar en los años 40, en el periodo de la posguerra, sin embargo, fue escrita a principios de los años 60 y publicada en 1962, es decir, en una época muy distinta. Como señala Ugarte, «if social criticism is the dominant factor of the novel, Martín-Santos wrote a book that was outdated before it was even published» (343). Esto nos lleva a la segunda aparente paradoja que reside en el estilo de la novela, que se aleja de las convenciones realistas. Tiempo de silencio no pretende ofrecer un retrato objetivo e imparcial de la realidad, sino todo lo contrario. El relato se subjetiviza, el lenguaje se complica, se emplean varias nuevas técnicas narrativas que afectan a la estructura de la narración. La innovación formal se debe en gran parte a la influencia de autores como Proust, Kafka, Joyce o Faulkner, los principales renovadores de la novela del siglo XX. Según Manuel Pulido Azpíroz, aunque se puede observar alguna «tímida innovación» en la literatura española de las décadas 40 y 50, «Martín-Santos es el renovador que aporta una técnica y estilo conocidos pero desusados en la novela española hasta 1962» (34-35). Entre los recursos narrativos empleados por Martín-Santos cabe destacar el uso del monólogo interior, la extraña concepción del tiempo de la narración con varias digresiones, la presencia de la técnica del flujo de conciencia, la narración desde múltiples perspectivas o el estilo algo cultista a la vez que científico. Todos estos rasgos hacen la novela más desafiante para el lector y de un cierto modo sobreponen los recursos estéticos a la misma historia. Volviendo al concepto del realismo dialéctico, podemos preguntarnos si se puede producir una «transformación social” a través de una obra de tanta complejidad formal. En su artículo «Contradicciones contradictorias: temas, estilo, ironía y metaironía en Tiempo de silencio», Óscar Useche intenta «responder a la pregunta de hasta qué punto la situación social y política de España, durante la primera década del franquismo, requiere el uso de temas y estilos como los de la novela de Martín-Santos» (4). A continuación, analiza los recursos estéticos y su relación con la trama y con el mensaje ideológico de la obra. Llega a la conclusión de que la experimentación estética está vinculada a la dimensión irónica, que forma una parte crucial de la novela. La presencia de la ironía en Tiempo de silencio ha sido objeto de estudio de varios trabajos, pues su presencia en la novela es bastante clara. A partir de la monografía Ironía e historia en Tiempo de Silencio de Jo Labanyi, Useche desarrolla el análisis de las contradicciones irónicas en la novela. Señala que la ironía se expresa a través de los recursos estéticos y, a la vez, la misma presencia de estos recursos resulta irónica, pues, según Useche, se trata entonces de una «novela que opera en función de la denuncia de una problemática, pero que, al mismo tiempo, es la problemática en sí» (13). A continuación, traza un interesante paralelo entre la forma de la novela y la situación española en la posguerra: El uso de una estética de ruptura resulta irónico, si se tiene en cuenta que la experimentación estaba condenada al fracaso, como lo estaba, en términos generales, cualquier idea relacionada con el progreso (a la postre vinculada con lo anti-español), de acuerdo con los lineamientos ideológicos en los que se soportaba el franquismo (15-16). Esta idea nos ofrece una posible respuesta a la pregunta que nos hemos planteado. Apunta al hecho de que la experimentación en Tiempo de silencio no es un mero juego estético, sino que tiene su razón de ser, vinculada a la transformación social. Volviendo a la definición del llamado realismo dialéctico y la propuesta de Martín-Santos de «plantear la real dinámica de las contradicciones in actu» para lograr la transformación social, podemos concluir que estas contradicciones se expresan no solamente en la trama, sino también en la misma forma de la novela y en su fuerte carácter irónico, expresado a través de la experimentación formal, cuya presencia en sí resulta contradictoria e irónica. Fuentes Fuentes primarias - Martín-Santos, Luis. Tiempo de silencio. Barcelona: Seix Barral, 1991. Fuentes secundarias - Labanyi, Joy. Ironía e historia en Tiempo de Silencio. Madrid: Taurus, 1985. - Lázaro, José. “El realismo dialéctico de Luis Martín Santos”. Cuadernos Hispanoamericanos 748 (2012): 25-36. - Pulido Azpíroz, Manuel. “Innovación y técnicas narrativas en Tiempo de silencio”. Hipertexto 8 (Verano 2008): 34-48. - Ugarte, Michael. “Tiempo de silencio and the Language of Displacement”. Modern Language Notes 96.2 (1981): 340-357. - Useche, Óscar Iván. “Contradicciones contradictorias: temas, estilo, ironía y metaironía en Tiempo de silencio”. Columbia University in the City of New York. Web. 23 mayo 2020