M Jorge Diaz Kl.l-A— (En la oscundad y con una vol susurratite.) Ah, dame U na no. No re veo. Tengo miedo. ÉL—(Con la misma voz.) ;Pónde esrás? ELLA—Tal vez encendiendo im fósforo. El.—Si, los cirios de nuestro ultimo velalorio. ELLA—Se podria interna r... iAmboi endenden unatenlluyprenden as velas de das candelabros tnonuorios que antes no se habian visio en ú eseenario. pern que ahora estän c n el web. El eseenario desnudo se ve i la debil y parpadeante luz de los cinos. El.lA tama elarpa que sc habia 'isto durante la obra en un rineón y El un largo tejido inconduso. Con H en las manas se sienta en la mecedora. ELL\ empieza a tocar el arpa. nterpreta el «lettmotiv» de la obra, eí sugerente y reiterativo terna del iovivo del parque de atracóones. El, sin puča de inhibition ni de búda, eponea tejer, meciéndose. Ambos sonrien beatfficamente. kl.l.A am dejar Ľ tocar el arpa.) j K] dia ha sido maravilloso! ÉL—Sí, pero ya no queda nada de nuestro parque de atracciones. ELLA—Solamente hasta maňana en que inventaremos o«ra Él.-Oada día es una maravillosa eaja de sorpresas con prcmios, un *rgo t dne] del amor. H.l.l a—En realidad... ;cómo podremos sobrevivir? ÉL—^A quŕ> ELLA-A esre carirto tremendo. Ej— ; Som os fuertes! Ella - \ 1 n v ul nerab les! Et.-[ínseparables! E LLa—] I n tolerable*! él-jIn-to le ra-bles!... A M BOS-; In - to - k - ra -bles: (Las cortinas se cierran mientras ÉL sigue tejiendo y medéndose y Í.'-M sigue tocando el arpa.) Emiuo Cardaluoo (Mexico, 1925) Emilie Carballido nació en Córdoba, Veracruz, en 1925. Se formó en la capital cuando su madre lo llevó alli muy joven, pero pasó un afto con s u padre en Veracruz en J 939 lo cual le dej ó jmpresiones profundas de la vída provincial, la selva y el mar. Celesiino Gorostiza y Salvador Novo influyen en su decision de eseribir teatro; Carlos Pellicer y Agustín Yáňe.i son sus maestros en la secundaria y la preparatoria, respectivamente. Estudia en la UNAM y comienza a tstrenar y p ubi kar piezas teatrales en 1948. El aňo 1950 es clave ya que nate su hijó Juan de l3ios, y estrena en el ľalacio de Bellas Aries. L)urante s u larga carrera ha eserito más de 30 ob ras com pie tas, más de 60 obra s cor ras, varias obras narrativasy muchos guiones cinematográ-fkos. Entre su producción dramática figu ran operas y piezas infantiles. A pesar de naber desernpeiiado vari os puestos docentes (fcscuela de Arte Dramático del IKBA, el Instituto Politécnico de Mexico y la Ľ N AM) administrativos, doc umen tales y editor iales (en 1975 fundó la revista teatral Trumoya que se sigue publicando en colaboración con Rutgers University Cti Estados Dni dos}, siempre se ha dedieado al teatro. Ha si do invitado i much os países, y ha dado clases en las umversidadesde Rutgers, Pittsburghy California. En 1977 renuncióa rod as sus actividades administratives para dedicarse a tiempo completo a la eseritura. Ko es simplemente por ser un autor prolifko que ha akanzado fama internacionál, sino por la calidad estetica y trascendental de sus obras. Su espíritu ereador lo ha Uevado hacia form as innovadoras, másallá de una orientación exclusivamente nacional,en su investigaeión de los problemas psicolóyicoi, ontológicos y aun politkos del hombre contemporáneo. Sobra decir que Carballido es el diamalurgo mexicano más conocido y consagrado de Mexico de la Sekunda mitad del siglo XX. La c ritka desde muy temprano ha seňalado dos tendencias fundamentales en la obra dramática de Carballido —la realista y la fantasti c a— y la tendencia a combinar las dos. Rosalba y los lliivcros \19ŕ>0), su primera obra de imporlancia, profundi/a en el contraste psicológico entre una joven metropolitana y sus primos provincianos, conientando las inhibiciones sexuales y morales de éstos, mientras El dia que sc solluron los leones (1963} expone los conflictos constanles entre la represión y la libertad. La danza que sueňa la tortugu (1954J es E m i 11 o C a r b a 11 i d o Y o tambié n h a b i o de la rosa 97 otra obra de provincias que sigue con la misma temática cn su retr«. de la voledad y las frustracioncs de dos solteronas. Fdkidad (1955). u na obra de titulu irónico y lono amargo. fiste ciel o culmina con hebra de oro (1955), obra que mezcla lo real y lo fantástico en \ figúra mági na y simbólica. El Hombre vuelve a! mundo real de süs im abuelas para darles la capacidad de reconocer sus problemas mi profundos. En los diez arios entre La hebra de oto y Yo también habla de I rosa, la obra presentada cn esta colección, Carballido experimenta com varias formas y técnicas. En Medusa (1962) y Teseo (1962), el autori rcinterpreta los mitos clásicos, dándoles Uli toque (original y existencia! ista. Hn los mismos aňos, estrihe lAi pcqueňo diu de ira (1962), obra que sin caer ni en lo didäctico ni lo melodramático critica el ambiente! polírico. También estrihe varias farsas como ;$ilencio, potlos petones, ya les van a cchar su maiz! {) 963} y Tejuro, Juana, que tengo gamu (1965), la primera un cuadro poliiico de la vida mexiema con toda su buro-cracia y su hipoeresia, la segunda un retrato cómko y algo burlesco de las experiencias amorosas de ün joven con n na in u jer madura, A parrirde Yo también hablo de la rosa (1965), Carballido muestra en su ereación dramárica aún más variedad de téma y forma. En el Almanaque de Juärez {19681, el dramaturgo adapta la tecnica brechtia-na en su recreaeiön y reexaminación de la história mexicana. El mensaie político-social de la obra surge de su toincidencia con la masacre de Tlatelolco. Carballido trasciende los limites temporales y nationales en Conversaáôn entre las ruirtas (1969), una pieza quesigue patrones míiicos en el retrato de las vidas ťracasadas de dos amantes. Hn el mismo aňo estribe Acapulco. los f unes, farsa en un acLo que desmkifka sin piedad el «paraiso» acapulqueňo de los que se quedan cuando tos turistas se van. F.n 1974 Carballido vuelve momcnlánea-mente a la mezcla de reaiidad y fantasía con su comedia Las cartas de Mozart basada en una noche migica de opera en litt Mexico decimo-nónico. Rn Un vais sin fin sobre et planétu (1970) y Fotografia en la piayn (1977), se presentan retratos familiäres en los cuales se entreeru-/an en una gran telaraňa las vídaš de sus miembros. Jose Guadalupe (1976) sigue las líneas artaudianas en su aspecto visual espectacular. En 1977, eseribió Sabui Oŕ/ŕnquees parte de una ereación colectiva hecha con César Rengifo (Venezuela), Osvaldo Dragún (Argentina) y Enrique 15uen aventura (Co)ombia). A Carballido le gusta ubicar sus piezas en un ambiente decimo-nónico como es el caso de Las cartas de Mozart (1974), obra impirada en una noche de opera cuando se mezcla n la reaiidad y la fantasía con una histona de amor, las verdaderas canas de Mozart y un ambiente social que eohibe las aventuras de una joven atraída fisicamente a un jtiendigo desiartalado. Tiempo de ladwnes: La história de Chucho el roto (1984) . cn una experiencia de teatro total, representa uno de los experimentos más ambiciosos de Carballido: un «folletin dramatico» en dos tandas con un repario enorme y algunas escenas «a sortear» sobre la vída de este «Robin Hood» que roba a los ricos para ayudar a los pobres. Además de las mjusticias socio-ecnnómicas que la obra expone, se nota en clla otra de las «instantes en las obras de Carballido, el poder infinito dcl individuo a reali/arse, tranxformändosc y tramformando su mundo por un Camino deacción positiva y de sensi-bilidad arlística. Oiro ŕactor constante en la dramaturgia carballidiana es el senlido del hunicu quc está presente aun cuando tratan aspectos seriös de la vida. Este se percibe especialmente en Orinoco (1982), pieza que despliega una naturale/.a amenazante por medio de un barco al garete en el ho. En él van dos coristas (o prostitutas) que representan diferenres actitudes frente a su situacion desesperada. Otra obra enormemenie exitnsa, y espeeialmente graciosa, es Rosa de dos aromas (1985) , en la que Carballido presema de nuevo su ctmcepción de (a nisa al jugar con los conceptos tradicionales del machisrno mexicano, vistos en las actitudes desaŕiantes de dos mujeres cuando deseubren por casualidad su relación con el mismo hombre y cuando urden sus planes de vengarse. En Fl mar y sus misterios (1988) el mar funciona como protagonista. Fn los aňos 90 Carballido sigue eseribiendo con la misma energia y vitalidad de siempre. En Tejŕr In Honda (1990) Carballido presenra a cínco mujeres (Lola, Lila. Lala. Lulú, Li!í) y a cinco hombres (Chon, Chuy, Chac, Chas, Ché) invokicrados en juegos amorosos y sexuales; Las bndos de San Isidro (1991) es un sainete a partir de tradiciones y leyendas querelanas de Uks siglos XVI al XIX. hscrito en et (uerpo de la noche (1991) examina la relación de un adolescente con una mujer mayor dentro de una situacion familiär; los esdavos de Estambui (1991) dramaiiza aspectos del poder y libertad por medio de dos jóvenes (esclavos) traídos a Mexico donde ellos fascinan a la gente local. Engaiio colorido con iíteres í 1995) conmemora la vida de la ilustre poeüsa mexicana Sor Juana Ines de la Cruz cn el aniversario de su nnierte (1695). Vkmtey Kantona (1996) es otra pieza historka. No es posible comentar aqui las numerosas piezas cortas de Carballido pero basta decir que incorporan las mismas técnicas y las mismas inquietudes de las obras completas. Buen ejemplo es «El 98 E m i I i o Carballido Y o t a m bi é n b a bl o de la_r osa 99 censo», una obra b reve liena de un humor situacional y linguistkoque comenta sobre la corrupción gubernamental. Las obras induidas en xarias vers ion es de Dŕcritkan, tas t siempre con h amor, lassituaciones ridículas o grotescas del ambiente capitalino. Carballido mine a esquiva sus obligaciones como esc ri to r conocido a ni vel international para exponer los vicios de la sociedad. Otra de las obligatio nos que siempre ha reconocido esle eseritor es la de fomentar d Leatro mexicano en todas sus dimensiones. AdemAs de ser eseritor protífico, de ha ber publitado, estrenado y traducido en los diferentes ámbitos tealraie.s del mundo, es el «pädre adoptivo» de toda una generación de eseritores jóvenes. Después de haber sido $u profesor en clases del IPN y la UNAM, ha hecho pro moci ň n de sus obras en cuatro tomos que han aparccido tu n variaci o nes en el título de leatro jo ven de Mexico. Es una generación que por razones eco-nómicas, politicas y culturales en Mexico, se vu> menos privilegiada en publica r y estrenar que la suya. I* generación de Carballido, que abarcaba talcs (igurascomo Luisa Iosefina llernández, Sergio Magaňa y Federico 5. Inetán, se aprovechó de condiciones más favorables al lan/ar sus carreras en los aňos 50. La obra de esta antológia, K> también hablo de la rosu, se ha montado con gran freeuencia desde ui estreno en [966. El éxito de la piera se debe en parte a la integraci ó n ran perfecta de tem a y récnica. Carballido comienza con una situación COiKitMi, pero al incorporarla en un contexio metafórico logra profuiidizar en las complejidades de la experiencia humana. La obra es, en cierto sentido, una dramatiza-ción del proceso creativo y. por ende, una negación de los sislcrrus que limitan tal proces*). El numero de interpretaciones diferentes dd incidente central sugiere las mane ras infinitas de concebir la realidad. Según Carballido, la realidad es, como la rosa, «un conjunto de liccnmes milagrosas... sin posibilidad alguna deexplkacion». La figura enigmitica de La íntermediaria ha provocado muchosestudios críticos (ver bibliografia) sobre esta obra que, como otras muchas de Carballido, capta elementos de la cultura populär dentro de u n ambiente metropoli ta no en u n diálogo nc tarnen te tipko del Mexico actual. Adernás, la interacción CúiUlante entre los elementos inexplicables y fanta st kos con otros de una realidad comundente real za miestra conciencia de la vision deí mundo que lleva, y que siguc creando, Carballido. En 1995, al cumplir 70 aňos de vida y a 45 aňos del estreno de Rosaibn y tos /.iavproj, se llevaron a cabo en Mexico muchos homenajes a Carballido por sus aportes extraordinarios en pro del teatro mexicano. Sigue si en do el teatrero in fati gable, toialmentc dedicado a fomentar el teatro, donde sea posible. Es un viajero constante, partieipando en festivalts y simposios de teatro, tanlo nacionales como internacionales. Su imprimátur sobre el teatro mexicano de la segunda mitad del siglo XX Consta sobre todo de una dedkación a la estética en todas sus dimensiones, a la experimentación, a la originalidad y la intepreración de la realidad que eonoce, urbana y provinciana, para un público mexicano e internacionál. Ha podido alcanzar estos niveles por s u propia cuenta mientras al mismo tiempo ha estado respaldando las caireras de un grupo amplio de eseritores jóvenes. Fs, sin lugar a dudas, uno de los dramaturgos latinoamericanos más ulentosos y iustaniente reconocidos por la comunidad internacionál. GEORGE VVüODYARD University af Kansas Emilio Carballido YO TAMBIÉN HABLO DE LA ROSA (Loa) Paia Yolanda Guilloinán, aclriz. I'orcjue dio vida y amor a Tona y a esia obra. Porque dici vida y amor a muehas obras. Porque dio Vida y Amor. Pero mi rosa no es la rosa tria... Xavim Vi l lau r rútia Amago de la humana arquitectura... Sou Juana Inés ok i.a Cruz Esta obka kur estrenada el d(a 16 de abril de 1966 en el Teatro llMČNF.z rueda, de la cjudad de mexico, con el SlGflIKXt Reparto La Intermediaria toňa í14 aňos) Po 10 (12 a nos) Maximino Conzález I" Profesor Seňor r° Prokksob i.oci-tor Muchách o Pobre Vendedor Ei. Estudiantf Seňor Pobre Vendedora MuciiACiiA Pobre Maestra Voceador Pepenador Pepenadora Madre de Polo PtíPKNAUOR J) Pepenadora II Seňora Mapu de Tona Seňora Pobre La Est udí ante Hermana de Tona Dueňo del taller [.os [3 os (JfK soň a ron Coro de danza Socorro Avelar A no vxi na Přt.árz jose Al.on so Felio Eliel Mario Casillas Sergio Jimenez Juan Angel Martínez Socokuo Mkblín Hector Martínez Jesús López Florenci o Sonia Montero Ekxi-.sto Cruz Liza Wiufht Luz Maří a Hioai.oo Enrique Campos Carlos Gacina y Jose Mata Miguel Akoki. Pai.mi-.icos Antonia Qliroz Isabel Hernandez y Raqufx Váz.qufz La acccón en la ciudah r>E Mexico. Música: Rafael ElizONDO CoreooraeIa: GUILLEKMlNA BRAVO Esci-n«<;rafIa; Gun.i.ERMQ Barclay Director: DagobírtO Gmllaumín Tos dcríchos minitthrs de la obra perle ittitn ,il Organismu it Prt)ni(ici(i« !nicn\aaonnl tlt CulXum y Iwrnn ccdidtn £íruilmentc poi tu dircclix, el iírtDt liixniudo Mijtuei Alvorci Acosta. Aparecen: La in tkhme-DlARIA TťtfÍA POLO Maximino GonzAlk/. i1"' prohnou 2n PROn-SOR LOCltor IVenPEDOI! V en uk dora VOCEAUÜR Pkpk nádor i Pepenadora i PH'ENAOOR II Pepenadora II Rl. RSTUlílANTE LA ESlVJJlAKTE dueňo del tali.fr (espaňol) Seňor Seňora Muchacho poure Much ach a pobre Seňor Pobre Sf.iíora Pobrf. Maestra Madre de tona Maure de- Polo hermana de toň a | y los dos oue S0ŇARON Un muchadio, una muchacha, dos mujeres y dos hombres son suficientes para actuar los personaies encerrados entre paréntesis. En Mexico, D.F. (Müska de davecm. Silencio. Oscuridad, Luz cenildl a la Intermediäria: 5f encuentra scntada en um silla con nsiento de paja, Vi$te como mujer de pueblo: blusa blanca y falda oscura, como el rebozo con que se eubre.) La InTERMEDIaRIA—Ibda la tarde oi latir mi cora7.ön. IToy tcrmine lemprano con mis Ureas y me quedc asi, quieta en mi siila» v'iendo bor rosa mente en torno y escuchando los golpecitos discretos y conti nuos que me daba en el pecho> con sus nudiüos, mi corazon: como el amante cauteloso al querer entrar» como el pollito que picotea las paredes del huevo, para salir a ver la Im. Me puse a imaginär mi corazön (Sc toca el pecho)> una compleja flor marina, leveroente sombria, rcplegado en \u cueva, muy capaz, muy metödico, entregado al trabaio de regulär extensiones innicnsas de canales crcpusculares, anchos como ruta para gondolas reales, angottos como via para tlcvar verduras y mercancias a lentos golpes de remo; todos pulsando diseip linados, las compuerras alerta para seguir el ritmo que les marca la enmaranada radiaeiön de la potente flor central. Pense* de pronro: si todos los corazones de! mundo sonaran en voa alta,.. Pero de eso no hay que hablar todavia. Pense en el aire tambien, que por cierlo olia a hämo y a comida ya fria; yo estaba como un pez, en mi siUa, rodeada por el aire; podia sentirlo en la piel, podia senlir las tenues corrientes que to enredaban, rozändome al pasar. Aire que lare y circula. Hice un recuento entonces de tod a otras corrientes inadvertidas y mane ja das por la radiante complejidad de una potente valvula central... Todos los dias llegan noticias. To man todas las formas: suenan, reiampaguean, se hacen explicitas o pueriles, se enirelaz-an, germin an. Megan noticias, las reeibo, las commiico, las asimilo, las contemplo. (Se levanta.);Noticias! 106 E m H i o C a r b a 11 i d o Y o lam b i én hablo de la rosa 107 (OSCUKIMD) (Hl estruendo dc un descarrilanúento: silbatos, grito$t fierros que se arrastran iobrefterm, voícaduras. SUcncio. Reíámpagos deslwnbradores.) (OSCUMDAD) (Entra corriendo un voceador.) VOCEADOR—Su prensa, joven, Iteve su penódico. Muchachos vagos que descarrilan un tren. Lea cómo pasó el impresionanfe desastre. Y cra nomás un třen de carga, qué tai si hubicra sido de pasaieros. Lleve su prensa de hoy, su prensa de hoy... (Sále.) \uida luz generál. Una callc: hay una caseta subido en un cajón, trata con un álambre de (Oscuridad y en seguida luz generál. Ur publica de tctefonos. Polo, subido en un cajón, maa con un aiamore ae extraer delicadamente la moneda qucguarda el aparato. Tona vigila uue 2 ae reiejonoí. ľoio, suotao e extraer delicadamente la moneda a nadie venga.) 'ľOŇA— (Aprha.) Apúrate, que ahí vicnen. jAguas, agua-s! jAhí viene un vicjo y creu que va a hablar! Viene viendo una librelita. (Poh sale de la caseta, queda parádo junto a la muchacha. Un hotnbre entra y en efecto va al teléfono. En tra a la caseta. Los chkcs se ven.) TONA-Está descompuexto. No si rve ese leléfono. (El hombre ibu a echarla moneda. Se dcticne. Ve a hi muchachos.) Homhkk—^No s i rve? polo Y TOlsA-No. (Él cuelga. Se va. Vuelve Polo a íu tarea y clla a su vigilancia. dl logra al fin sacar la moneda del aparato. La ven juntos, contentos.) Tona—iQvé compramos? polo-Plátanos. TC)ňa-[Alegrias! Mejor alegria.s. POLO-Iiueno. ton a-En la calzada hay otro teléfono. PoijO-Pasa mucha gente. Mc vcn. Tona—En la noche no pasa mucha geme. Polo-A ver. ;Vamos a comprar! '.Catn'inan hacia un vendcdor de dulcesque viene con su tabla.) POLO-£ dop—~t De a cómo? Toňa-jDc a veinte! VOLO-ÍDudoso.) Mejor de a diez, mo? Veni>íDOR-No se mc raje. De a vrime. Úrale, vuela. PoiO—jÁguila! VfNDtnOR-Sol. (La ven. Psie secmbolsa la moneda y seva. Un silettcio. Tonu y Polo eňtnitum.} Tona—Pues yo crcí que... Pues podías haberle ganado. t.o hulí ie ras echa do lii. (Silettcio: Caminan. Patean algo.) TOŇA-Pues... Hubieras d ich o que no jugabas el volado. Para qué lo jugaste de a veinte. Yo nomás decía. polo-Oh. ya cállese. (Silcncio.) ToŇA-Juégale om>. POLO-jCon qué? Tona—Yo tengo aquí lo dc mi camión. POLO—j Y luego con qué te vas? ToS'a-Pues... pues... le ganas, j no? PotO-Si... re fácil. Tona—Pero échalo lú. Toma. polo-jOiga! jOiga! jjugamos otro volado! (Vueive el Vendedôr.) Vendh.dor—jjugamos otro? POLO-Yo lo echo. Ven l> h dor—^ De a cómo? ToŇ"a-De a veinte. 108 E m i I i o C a r b a H i d o Y O también h ab i o de ta rosa 109 POLU-l>e a veinte. Vuela. V e n d [• dor—Sol. (Ven.) Sol. (Recoge la moneda.) TütsA-Pues yo lo echo. A ver. Vuela. [Aguila! (Ven.) Ganč. VtNPtDOK—Pero el que echa no pide. Vuela otra vez. 1'oňa—Ah, si, ^verdad? Porque gané yo. No se vale. PüLO—Es que es m u jer. Nu sabe. Tona-; Y qué? jYo gané J vendkook-Ändale. iQué quieren? tos a-Dos de a diez. (Toman los dulces.) Vj-ndeixjr—Echamos otro. (Ellos se ven.) polo-Vuela. De a veinte. (Lo echa.) Vendedor-SoI. C Ve J Sol. ptro? (Kilos tiiegan. £.1 recoge la moneda y se va.) ToS'A-;Para qué 1c echaste otro? Ya h ab ía mos ganado. Ahí es tas, de picado. Ya desacompleté lo de mi camion. Y es re tarde. Or a co mo me vov a la cscuda. (Comtn.) TOS a—De todos modus... no hice la rarea. (St limpia las manos en el vestido.} ft ú no vas a la escuela? polo-No ten go zapatos. Hasta la semana que vicne me los compran. Ti)SA—ľues vete asi. Pol O—La maestra revisa al entrar si les dim os grasa. Ni modo que me dě grasa en las patas. To Ň A—Me queda un veinte. ^Compramos jkama? POLO-Uueno. \Ahora hay una vieja vendmtdo jkama.) Polo-Dos de a cinto ViĽjA-Son de a diez. Toň a—h'stán re caras. Y chiquitas. A dos po r quince, ;no? vieja-Ándele, pues. ToSA-Con chile. 'Lis prepara, se las da, pagan, comen.) POl.O— Queda u n tjuinto. ToSA—Lo guardamos, para el rato. (Liegau al telejona.) POLO—ÍOcurrenáa repentina.) ^No habrá hablado nadie? (Fntra a la cascta, aha la bocina, la cuelga de nuevo; cae un veinte, devuello. Lo saca, atomto.) POLü-fSaliö solito! i Cay ó an veinte solo! [Mira, un veinte! ;Lo aké y salió! (Tona eiitTu eorriendo y aha y ba ja la bodná, golpea cl aparato. lo sacude, le nmeve el disco, le jalonea el gancho. muy aprisa y con mucha viole ricia. Cuclga) TüNA-Ya no salen más. POl.O—Ahí vi en e Maximin o. ;Quihubo! (Losaludan. Entra Maximmo. Uws23aňos. Viste sudadera blanca, no muy limpia, pantalón de inczcUUa viejo, zapatos cenisj Max im í n'o-Q uih ubo. TOSa-Nos encontramos un veime en el teléfono. F.ste lo alzó y sali ó solito. PüLO—Y yo le saqué otro, con un alambre. MAXIMINO-Ándele y que les caigan. ToŕíA->Qué nos bacen? MaximiNO—Me los ggardan cinco an os, o más. lOSA—A p oco. For un veinte. MAXiMiNO-Pues dar«. 1 OSa-Yo nada más le eche aguas. MAX[MiN't)-Cómplice. Cuatro aňos. (Breve silencio ineómodo.) Poi.o— en el taller, crtmo. May que recüncarla. ToNa—Lo que pasa, que esa motocideta ni sirve. PüLO—Nomäs estäs hablando de hocicona, ni sabes nada de nada. TONA— jY ti'i si sabes! A poco es muy buena. Ya esta rcle usada. MaXIMIKO— (Con orgullo.) 250 <:entJmerros cübkos de eilindrada y un caballaje de 16. Nomäs. TONA-^Y eso que? MAXI MINO—Kso quiere dedr que es muy huena. Tona—(Convencida.) Aaah. Pues yo ia veäa tan vieja,.. Maximino-;Y ora que hacen aqui? ;No fueron a la escuela? POLO-Yo no tengo zapatos y esta se gastö el dinero de su cami6n. TONA—Se lo gastA el, se lo jugo en volados. POLO-Chisniosa, vieja habia de ser. Ella quiso jugar. MAXlMlNü-Te doy para ni camiön. TOKA-De todos modos... No habia hedio mi tarea. Mejor me hates uiia carta diciendo que estuve enferma. ^Si me la haces? Maximino— Bueno, ^y que digo? ToKA-Te la dicto luego. MAXIMINO—;Y adonde van a largarse toda la manana? polo—Pues... a vor. Vämonos por la via, tü. TONA-Puros basureros hay alli. Polo—Luego eneuentra uno cosas. Y se ve pasar el tren. TüNA-^Que traes aqui? Dejame ver. (La cartera de Maximino, que el trac en la boha posterior del pantalön.) POLO-Ora, no tiente. "j Ona—Deja ver. (Le saca la cartera. Se sicnta a ver lo que coniienc. Max y Polo la observan, con paciencia masculina.) l'O^A-Ay, que guapo saliste en este retrato. Regals melo. MAXlMrNO-Si, se rompiö la camara. »Para qu6 h quieres? TotsA-Para tencrlo. Rcgalameio. MAXIMINO—No, luego lo necesito y no tengo. TONa—Si me lo Aas... lo pongo cn mi espejo. en el cuarto. POLO-Lo va a ensenar y va a decir que eres su novio. TONA-Mentiras, que te importa. Regälamelo. MAXIMINO—Bueno, tenlo. lOlsA-Pero escribele algo, anda. (Maximino eneuentra esto muydtfiäl. Torna su lapkero, va a poner lÜgO.'l MaXIMINO—No, para que. Llevatelo asi. tuna-Cstribele, anda, escn'belc. (Maximino piensa. Se menia y escribe dificultosairtentc. Se dedene. Piensa de nuevo. Fscribe, Firma con gran rübrica que apena< cabc en el carumeilo. Lo da, un poco ruboroso, a la tnuchacha.) Ton a-(!OR—(7fl« confuso que cast no se entietide.) Dum los ha de ravorecer. (Sale.) toka-^Le diste todo? POLO-Pues sí. ToRa-;Tc pidió un quimito! Ay, que" larugo. Poio—jPues t ú dijiste que le diera! toňa—Per» no todo. Te pidió un quintitu. Polo—Loca y además coda. TOŇA—Ya ni modo. Hiiele re macizo aqui. POLO—A basura. ToSa—A... yerbas. Si,ayerbasrefuerte. Esasyerbas. Yhuele a... Hay m uch as moscas. Ha de haber un animal muerto. 'Se pone a cantor a gritos una espeáe de acampaňawiento de orquesta, baila.) Poj.o-Tas loca. tú. TOSlA-^Nosabesbailar? Mi hermana mc enseňčéste, mira. (Hace cl paso, amtando.) ^Ko sabes? POLO—Si. (Haila un momenta con ella. luego se aleja. La deja bailtnido.) ;Una pieza de motor! (Saca un ficrra irreconoctble, de entre la basura, le da vueltas perplejas entre las maws) TOSA—i Para que sirve? Polo—Para u n motor. Se lo voy a Ik var a Maxim i no. (I.o deja a un lado.) TORA—Voy a hater un ramo de ílores. (Empicza a cottar florecitas tninúsculas. Grit a.) FOLO-jQué pasó? Toňa—Me piqué. Tiene espinas. Ay, mamacita linda. (Se chupa el dedo. Trueultnta.) Mira: me salió sangre. (Cama y baüa tu paso nuevo, corta flora.) Poi.O-Ayer ťui a ver «Fl enmascarado negro contra los mons-truos*. toňa—Yo fui a vercl domiugo, «La mansion de la sombra negra*. Me dio ranto miedo que en la noche gritě, porque soňé cosas. Poi o-^Qué soňasic? 'l'OSA-Quién sabe. Re fco. ŕ.stas son avispas. Hay mucha*. Y pi can. Poi.o-Te pican si les tienes miedu. (ÉI hace equilibria! en el riel.) POLO—Hay unos lipos que caminan en alambres, rete alio; agarran u n palo para hacer cquilibrios y caminan. Se ha de poder. TOŘa—SL Salen en el cine. Polo-Pero ah í .son p u ros trucos. TOŇA—Yo vi una que se para sobre un caballo y luego va en un pie, asi, y el caballo corre. Yo lo vi, En el circo. POLO-;Cuándo fuistes? TofJA—Una ve/.. Me llevó mi papá. 114 E m 11 i p Carba Iii d o Y o ta m bi é n habl o tí e_la ros a 115 PtUO-; No que sc muri ó tu papá? l'O&A—Pu« sí, pero antes me llevó al circo. Era re buena gcnte mi papá. Tambicn había un oso que andaha en bicicleta. PULO—Qu é ch iste tiene and a r en bicicleta. 'J oňa—Pues al oso !e daba rete harto trabajo. Mira las ŕlores qne junté. Polo—Tan poquítas. TOŇA-Luego junto más, no me vavart a pkar las avispas. ;Mira! Esa lata está buena para mačeta, l'ara una planta bien grande. (Es una lata redonda, de buen tamaŕio. La va a tornar, no paede alzarla.) TOKa—Ay, pesa. Pulo—A poco. Ya. (Le chifla su burla.) No puedes alzarla. (Va: tampoco A puede. Trata de nucvo: no paede. Se monxa casi sobre ella, sin lograr levantarla. Ella se ríe tanto que se le caen las flores. Las recoge, riéndose. J POl.O-;Y ora? ;Qué le pasa a esto? (Se ha asustado un poco. Tona se (fueda séria: nota algo irreal en el peso de aquello.i ToNa-;No puedes? Po (.o—íPreocupado.) Nu. ('tona da un gritito. Se aleja apretando sus flores contra el pecho.) TüN"A—Es muy raro que pese tanu>. POLO—Miedosa. (Se aleja de la lata. Un silencio.) A ver qué tiene 1'Oňa—Déiala mejor. POLO-fi^ da vuclias am cautela.) jPor qué pesará tanto? jEsti liena de cementu! ľOŇA-iSÍ? íPor qué? POLO—Ha de ser una de esas que agarran los albaňiles para... cosas. Mira r está liena de cemento. TONA-Ah. Eso era. .f Vej Si. Está liena de cemento. No sírve para mačeta. esto el peS a Camarybaik' s« P°* t**> *pone unas florecitas en TOfTA-Mirm, qué tal. VOlO—iRueda la lala con el pie.l Se puede rodar. A ver, ayúdame. Tona -Espérate. (Se pone otras flores.) A hora sí. (lo ayuda. Ruedan la lata.) Tona—^Dónde la llevamosr P01.o—Al otro lado de la vía. (La ruedan bacia elfondo.} Por allá está más difícil. (La llevan rodando hacia lo más difícil: el fondo, a la izquierda. Se oye el silbalo del tren.) TorŠA-Apúrate, que ahí viene el tren. (Se apuran. Están en lo má* alto del terreno. Se oye lejos el silbato del tren. Se ven.) los dos—j Va mos a ponerla en la vía! (La idea les da risa nerviosa y alegre. Empujan. La lata pesa y en á welo hay obstat ulos, quiere regresarse. Elbs empujan. Suena el silbato, más cerca. Hllos empujan la lata. Saleti, Silbatazos. E! tren llega. La luz disminuye. Seoyeclcstruendodcldescanilamiento. Oseuridad. Relámpa-gos que iluminan a los muchachos en la misma postura, viendo fascina-dos.) (OSCVMIMD) VOCÍADOR— (Se le oye en b oscuro.) Lea la noticia del descarrila-miento. Grandes pérdidas. Grandes pérdidas. Grave desastre ocasiona-do por unos vagos. La prensa de hoy, la prensa de hoy. (Luz. La Intermediaria está ante un enorme libro, puesto en un atril o en algo prapio para hojearlo. irá mostrando grabados enormes y minuciosos qne hay en cada hoja. Son quizá grabados antiguos, podría pensarseen Durero, o en ciertas láminas botánicas o Zoológicas alemanas del xix, o en los códkes mexicanos [o en las tres coiasj. Están tenuemente policromados. Hlla viste en colores algo más claros.) intermediär)a—En este libro hay imágenes de animales. (Lo abre.) Daré noticia de ellos. El perro está iiucritú aquí como guardián de la integridad física del hombre que le haya sido designado. Ünico entre las beslias, posee scntido de propiedad, siempre nos dice: «mi casa, mi patio, mi árbol, mi dinero, mi amo, mi amor». Lo cuida y lo 116 E m i I i o Carbaliido defiende co mo u n avaro, corn o un apasionado, dcscubre asi ladrones, deseubre a pedigueňos, deseubre cobradores, y a todos ladra y agrede. «Yo pro tej o a mi amo y al mundo)». £l cree que ju casa es el ej e de) mundo. (Otra hoja.) F.I gato cuida la integridad cspirilual dc quienes con ji dera sus amigns. ŕ.l recoge las sombra.s, ŕl cxpulsa las inalas voluntades, hace peqnenos sacriricios sangrienros por el bien de la casa; mata ratones huidizos, a ves canoras y pol los asombrados: luego, con la preša en Ire los dien les real i/a rá un r i to. En la noche va a La azotca: analiza los halos. las ondas, los vapores. consulta el aire, se le ccmfían raieas, corre y da gritos espeluznados, se perpetua... O se entrega gusloso a los cstragos dc algún rayo secrelo, que cstaba des ti nado a personas de su más aha estimacicm. Por eso hay gatos que perecen de manera enigmática. (Otra hoja.) La gal lina es un gran alm3cén alimenti d o: da diariamente, con u n esfuerzo duke, hue vos de ngurosa estética que encierran en su cascara una explosion in mensa de corrales; y preguntas etcrnas, como: ^quicn fue primeror... Mas cuidado si al partirlos hay en la clara nubarrones o la yema es confusa: tal vez alguna vieja limpid un cuerpo de pasiones y enfeimedades con ese hucvo, tal vez hemos (| uch rado la pequeiia caja de una Pandora de la vecindad, y mientras ella rie su salud recobrada, nosotros nos hallamox a un pas» de ingerir sus viejos males. (Otra hoja.) Cuidado con los peces dc colores; hacen circulos caprichosos, tejen, destejen, tejen escrituras oceánicas, ven con sus ojos mucrtos a travčs del tristal y I la man con su.s aletas, II am an enfermedades escamosas. giran y van y víenen y hacen signos que más vale ignorar y que lecmos tuando ya es larde. Cuidado con las peceras. bus mejores guardianes son los gatos. (Otra.) Las mariposas dice n cosas profunda* D ken: fugacidad, m ister io, D ken: «Amamos los ca m bios sorprendentes». Di cen: «Tbdo es posibic». Dicen: «lodo tt valc». (Otra.) Hay las serpiemes, con un secreto fulminante y profundo a flor de labio. (Otra.) Hay las abejas, que sa be r i de la energia solar y de la luz lo que no sospechamos si-quiera. Hay.., hay muchos libros. Y muchas advertencias... (Sequeda asintiendo, con ují dedo en los labios, mientras la luz se desvanece. Luz Cen i ta) a primer te'rmino. Está un puesto de periödicos- El rnuckacho que los vende aí lado. Un seňor y lina sefiora ven los periödicos desplegados.) SbN'OKA-{Come algo.) ;No dice nada del deseunrtizado? V o ř a m Ď í é n habt o de la rosa 117 UWOK—Unos vagos descarnlaron un tren. Qué bárbaros. Le pusieron un bote con cemento, para voltearlo. SeňORa-í ľensandoen otra cosa.) Salvajes, puros salvajes tenemos aqui. t'Jnteresada.) ^Hubo muertos? í>kňoh-No. Hra un tren de earga. Se voltearon earros. Mira qui caras. Dice que tienen... docc y catorce anos. ľarecen de 40. (Luz alfondo: dos fota enormes de Tona y Polo, tan simestras como cualquicr foto de polícia: se ven avejentados y asustados, capturados a la mi t ad de alguna leve mueca desconcertadu.) ^LSOK\-(Diítraída.) Es el vicio. Esa gente es viciosa desde chica. seňor— (Viendo si viene el camión.) ;Ha de ser la miseria! SeNORa-Sí, la miseria es horrible. ^Nodecía nada del descuarliza- Senor—Allá vienc el camión. (Van a totnarlo.) VuCEADOR-Noticias, la prensa de hoy... (OSCVKIDAD) (Luz a la Maestra, que avanza a primer término, tnuy polveada, "permanente», boca pequeňa >nuy roja, tiene unos 60 aňos.) majstra-Antes de que cmpeccnios la clase quiero que sepan algo muy triste y vergonzoso para esta escuela: un compaňero de ustedes, Leopoldo Bravo, ha cometido un aclo delictuoso y se encuentra preso. Como dice bien el periódico, ha sido culpa de la vagancia y (Lee.) la malvivencia. Ese muchacho estaha repitiendo el quinto aňo, no sé por qué lo admitieron. jNo vamo.% a admitir reprobados el aňo entrame! jLo oyen! Vagancia, cstupidez y... faita de civismo. (Lee.) Los delin-cnentes juveniles quedaron inmóviles junto a la via, viendo su obra. Fucron capturados fácilmcnte. (Aíieme, busca otra trozo ejempSar.) Debe culparse tamhién al abandono de los padres (Asicnte.) que dejan a sus hijos entregados a la vagancia, y al deseuido de los maes... (Calla. Dobia el periodica.] ľues ya lo sahen, eso pasó. Se lo he dicho porque esto tiene una lección para todos: no deben andar de vagos. Tú, Martinez J'cdro, que nunca tracs la tarea, óyelo bien: tu amigote ya está en la cárcel. Y tú, Antúnez, fijatc: si repruebas, [no vuelvas a esta escuela! Y acuérdense que deben traer su uniforme blanco para el lune s, sin falta, o no serán recibidos. Ko hay pretexto: no me saiga n 118 Emjlj o C a r b a I I i d o Yo tambi6n habto de la ros a ton que no tienen para comprarlo, que en otras cosas si gastan. Ahora, vamos a ver. los quebrados, Tii mismo, Antunez, dinos: ^que es el comun denominador? (OSCVklt)Ai)) (Dos cstudtantcs untversitarios ken el periddkn.) La estudiante tren. Estos, mira F.L ESTLrDIANTQ-La ESTUOIANTE-EL ESTL'DlANTE- (Rie.) la f,S"[ up1ante- arbol de corbata. ;Se hacer eso? EL ESTL'DIaNTF-La RSTUDIANTE— -^Ya viste? Unos chamaquitos descarrilaron un Que barbaros. ^No se mato nadie? [Lee.) ■No, de casualidad. Era un tren de carga. ■Que vaciados escuincles. Se volaron la barda. Se voltearon dos ear ros y la maquina se IJevo un rompio toda! (Si rie.) jl'ero que les daria por Puntada. Que tipos, se inspiraron. (Se rien.) (OSCURJDAD) (F.l taller. Maximino trabaja en un motor. Suena el telefono.) MaX! Ml no—Rue no. — *Afinaciones Larranaga». -Yo soy, habla Maximino. —Ah, quihiibole. — ;Cuales cuates mios? -^A la carcel? —;C6mo va a ser! —^A lo macho? -;Les cayeron en un telefono! — ^Un que? ,Un tren! -^Comoque descarrilaron untren? ;Palabra? —-(Qucdito. i No tue la polícia. MADRt-;Qué dices? POLO-lQuedo.) Que no fue la polícia. Fue el maquinisia del tren. MaDRE—no podia ústě correr? ^Hara qué tiene las patas? (Llora.) Ahora que iba a comprarte tus zapatos, esla quincena. Mi patrona conoce un seňor que es rete huen abogado, pero quién sabe cuánto cobre. Y el periódico dice que ese třen valia medio milión de pesos. (Se enfurece. Lo sacude.) Pero si lo habia yo de matar a golpes, por tarugo. jQuién no lo ve, tan mustio? Cabresto mocoso tan idiota, se les ocurrió que alguien pudo matarse? IWA-Puesluego sí.poreso ni corrimos. Nos diotanto sústo que ahi nos quedamos tiesos. Ay, se vio re fco. MAXIMINO—Pues claro. La máquina medio se cayň, tres carros se voltearon y se rompieron. Y luego vinieron una bola de fipos de ese rumbo y se robaron las mercancías. jSabes cuánto costó el chiste? Medio milión de pesos. ToŇA-jTanto! (Se queda pensando.) jComo cuánto será eso? Maximino—Pero qué hruros son. Yo quería ver si pagando una multa salian fuera, pero qué va. Éste fuc un chiste muy čaro. (IM silencio.) To>i\—(Truadenra.í Hav unas niňasconmigoque le echaron una olla de agua hirviendo a un seňor, tuando les fue a cobrar la renta. Que di/.que no tue adrede, ^tú erees? Y hay una chamaca que x-endia m ar iguana. Y luego hay otra que cobraba dinero por ensenar encuera-das a unas niňas, ;y les cayeron !as mamas de las niňas! Pero ella dice que a las niňas sí les gustaba mucho enctierarse. ťtú crees? Y luego hay on a... 132 E m i I i o C a r b a M i d o Y a también h a b I o de ta rosa 133 Maximino—(Dcíespentdo.i Tú no tc juiilcs con elks, no les rubles. A nadie. ToWa—Son buenas genres. Son más cuatas que mis amigas de la escuela. Les dio harta risa que yo hava volteado u n třen. Maximino- que más vale mal acompaňa-do y no solo. Pl-:PENADO]iA-Ah qur ustedex, quién sabe por qué dirán esas cosas. PEľPNAUOR-CCfl/fťíJ.) Tu boquita me provoca p a que la cierres un rat o, tienes unos dientes lindos, lástima que falten tantos. 134 Emil i o Cafballido Tu garganta es com o un río, la conozco por sus cantos... tu garganta es como un rín de esos que parecen caňos. (Critos y aplausos.) PEPENADORA-Cómo será usté. No me gusto la canción. PEHENADOR-;A lo macho no le gusto? iarj\—ÍPrťgwHta como maestra.) ^Y el fulgor de esa estrclla extinguida, desde hace tantos aňos luz? Tona—(Recita la lección, abrazandoa Maximino.) Seguía Hegando a! telescopio, pero qucría decir ran sólo la vida hum tide de un cazador peludo que un amigo pintor retrató en las paredes de una cueva africana. {El bailc se vuelve. ahora una especie de caderta algo solemne, todos pasan de mano en mano, combinándose con precision y complejidad. Maximino-Y ahora todos... Toň a-en las manos de todos... polo-vamos a oír latír... 139 TONA-larga mentě... m^lMlNO-elmisterio... řA„w««s In i f.rmedi a ri a—de nuestros propios coraames-fitti* la danzv, la cadena. La luz ha ,do aumentandoprogresiva-fi* atoZhW alcamar la maxima mtenstdad.; n\ente como T ELÓN