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El acento en el verso español

Como ya sabemos, el acentoacentoEnergía articulatoria de la sílaba. Dentro del campo de la prosodia, el acento (léxico) es un rasgo suprasegmental. En el español es un rasgo fonológico; en el checo, no.Pojem ve slovníku español tiene una función fonológica, es decir, tiene el poder de distinguir entre los significados de las palabras. Por eso es también un elemento bastante importante en el verso. En la poesía de una literatura pueden convivir varios sistemas de versificaciónsistema de versificaciónSistema de rasgos (fónicos) de los que dispone una determinada lengua y en cuya base se forma el ritmo del verso. En una literatura pueden convivir varias versificaciones al mismo tiempo. Los sistemas de versificación presentes en las lenguas y literaturas europeas son: versificación silábica, versificación silabotónica, versificación tónica, versificación cuantitativa; algunos autores consideran también el verso libre como un sistema de versificación independiente.Pojem ve slovníku, y en la española nos encontramos con una variedad enorme de posibilidades (que esperamos mostrar en este capítulo), en las cuales la importancia del acento cambia según el tipo de versificación que analizamos. Sea como sea, el acento es «el alma del verso» español (ejemplo sacado de Paraíso 2000: 76Paraíso, Isabel (2000), La métrica española en su contexto románico, Madrid, Arco Libros.)

En el verso se refleja la pronunciación normativa (recuérdese el capítulo sobre la acentuación de las palabras españolas). Sin embargo, también en el ritmo acentual nos encontramos con ciertas licencias, basadas en la convención, pues asimismo en el verso tenemos que distinguir entre la norma prosódicaprosodiaDisciplina que se ocupa de las unidades que en el verso están sujetas a una mayor organización que en la prosa (acento, cantidad, etc.) Es una rama de la Teoría del Verso.Pojem ve slovníku de la lengua y las exigencias métricasmetroUn esquema abstracto (de cierto número de sílabas, distribución de acentos). Se opone al concepto del ritmo, que es la solución concreta elegida por el poeta. La tensión entre el metro y ritmo es característica del verso. Las configuraciones métricas dependen del sistema de versificación.Pojem ve slovníku (al igual que en el cómputo de sílabas, el recuento fonológico puede diferir del métrico).

De esta manera, en el verso español ocurren:

  • desplazamientos del acento,
  • acentuación de sílabas átonas,
  • doble acentuación de polisílabos,
  • acentuación de monosílabos
  • desacentuación de sílabas tónicas

(Domínguez Caparrós 1993: 84)Domínguez Caparrós, José (1993), Métrica española, Madrid, Síntesis.

¡Ya viene el cortejo!
¡Ya viene el cortejo! Ya se oyen los claros clarines.
La espada se anuncia con vivo reflejo:
ya viene, oro y hierro, el cortejo de los paladines.

(Rubén Darío; citado por Domínguez Caparrós 1993: 84)Domínguez Caparrós, José (1993), Métrica española, Madrid, Síntesis.

En el ejemplo del poema «Marcha Triunfal» de Rubén Darío se puede ver que está compuesto en la base del pie anfíbracoanfíbracoPie de tres tiempos; en el silabotonismo consiste en la sucesión de sílabas átona, tónica, átona; en la versificación cuantitativa: breve, larga, breve.Pojem ve slovníku (esquema U–U). Darío es un típico representante de los experimentos modernistas con la versificación silabotónicaversificación silabotónicaSistema de versificación que se basa tanto en el número de sílabas como en la acentuación de la sílaba (oposición tónica/átona). Aparece por ejemplo en el verso inglés, alemán, checo, ruso, pero también en el español (versificación de cláusulas, versos de arte mayor, etc.)Pojem ve slovníku o, como la llaman algunos metristas españoles, de cláusulaspie métricoTambién se denomina cláusula. Un grupo de dos (troqueo, yambo) o tres (dáctilo, anfíbraco, anapesto) sílabas y un acento en una de ellas.Pojem ve slovníku (cláusula = pie). El factor silábico, de hecho, resulta disminuido, porque cada verso tiene un número de sílabas diferente; la base son las tres sílabas de cada pie y estos se encadenan libremente según la voluntad del poeta. Debido al carácter silabotónico del metro, al leerlo nos vemos obligados a: 1) desacentuar los adverbios ya, que normalmente llevan acento; 2) desacentuar la palabra oro en el cuarto verso; 3) acentuar el artículo los en el mismo verso. Fijémonos también en la multitud de sinalefassinalefaFenómeno que consiste en que se reúnen en una sílaba métrica las vocales contiguas pertenecientes a palabras distintas. No siempre es una licencia métrica: la sinalefa es natural en la pronunciación del español.Pojem ve slovníku que hay que producir para que el cómputo silábico concuerde con el esquema.

Y de favor desnudo
padece otros tres males
demás deste mal crudo porque osada-
mente dio a sus iguales
la ambrosia que no pudo.
7
7
11
7
7

(Píndaro, trad. Fray Luis de León)

En este ejemplo la acentuación está afectada por el silabismo versificación silábicaSistema de versificación que se basa en el número de sílabas del verso. Aparece por ejemplo en el verso francés, español o polaco.Pojem ve slovníku del poema: el último verso heptasílaboheptasílaboVerso de diecisiete sílabas.Pojem ve slovníku exige el desplazamiento de su acento (ambrosía → ambrosia), porque la variante correcta tiene 4 sílabas; cuando se produce la sístolesístoleLicencia que consiste en que el acento de una sílaba se desplaza a la sílaba anterior.Pojem ve slovníku (el acento adelanta su posición; el caso opuesto se llama diástolediástoleLicencia consistente en desplazar el acento de una sílaba a la siguiente.Pojem ve slovníku), el hiatohiatoFenómeno opuesto al diptongo: se produce cuando dos vocales contiguas corresponden a dos sílabas distintas.Pojem ve slovníku de –sía se convierte en diptongodiptongoUna sílaba que contiene dos vocales.Pojem ve slovníku y la palabra se queda con 3 sílabas que caben en el metro heptasílabo.

Los acentos en el verso se clasifican según su coincidencia o no con el esquema métrico:

  1. El acento rítmico es el exigido por el metro. Según lo que sabemos sobre la convención de contar una sílaba más al verso que termina con palabra oxítonaoxítonaPalabra oxítona (aguda) / verso oxítono (agudo). La palabra oxítona lleva acento en la última sílaba. El verso oxítono se acentúa en la última sílaba (es decir, la última palabra de este verso es oxítona), pero debido a la equivalencia de finales agudos, llanos y esdrújulos se le cuenta una sílaba más.Pojem ve slovníku y una menos si la última palabra es proparoxítonaproparoxítonaPalabra proparoxítona (esdrújula) / verso proparoxítono (esdrújulo). La palabra proparoxítona lleva acento en la antepenúltima sílaba. El verso proparoxítono se acentúa en la antepenúltima sílaba (es decir, la última palabra de este verso es proparoxítona), pero debido a la equivalencia de finales agudos, llanos y esdrújulos se le cuenta una sílaba menos.Pojem ve slovníku, resulta que el último acento del verso está siempre en la penúltima sílaba del metro. Es una constante métrica, el acento viene exigido por el metro. En el octosílabooctosílaboVerso de ocho sílabas.Pojem ve slovníku, la sílaba séptima siempre cuenta con un acento rítmico. En el caso de la versificación silabotónicaversificación silabotónicaSistema de versificación que se basa en el número de sílabas del verso. Aparece por ejemplo en el verso francés, español o polaco.Pojem ve slovníku, el acento rítmico es el que coincide con el tiempo fuerte de los pies. Por ejemplo, en los versos anfibráquicosanfíbracoPie de tres tiempos; en el silabotonismo consiste en la sucesión de sílabas átona, tónica, átona; en la versificación cuantitativa: breve, larga, breve.Pojem ve slovníku de Rubén Darío citados más arriba («Ya viene el cortejo»…), rítmico es siempre el segundo acento de cada pie.
  2. El acento extrarrítmico es el que no viene exigido por el esquema métrico y a la vez no es vecino de un acento rítmico.
  3. El acento antirrítmico es el que ocupa la posición inmediata a un acento rítmico. Se trata de un acento «mal puesto», cacofónico. (Eso no impide, por supuesto, que algunos poetas lo utilicen precisamente para provocar incomodidad en el lector.) En el octosílabooctosílaboVerso de ocho sílabas.Pojem ve slovníku del romanceromanceForma no estrófica de versos octosílabos que van en tiradas (no forman estrofas). La rima asonante aparece en los versos pares.Pojem ve slovníku citado más arriba sería antirrítmico el acento que apareciera en la sexta sílaba, porque el rítmico ocupa la séptima. En el poema «Marcha Triunfal» son antirrítmicos los acentos en los adverbios ya y en oro, por eso tenemos que desacentuar esas palabras.1

Volvamos a la unión del verso con la música, porque aquí las cosas se complican un poco más. Como sabemos, el verso cantablecanto Emisión controlada de sonidos. El verso cantable se realiza plenamente solo en relación con la música. Pojem ve slovníku no podemos interpretarlo separado de su acompañamiento musical. El compás puede influir en la acentuación, como vemos en este ejemplo:

Se va enredando, enredando,
como en el muro la hiedra,
y va brotando, brotando,
como el musguito en la piedra.

(Violeta Parra)

En la canción de Violeta Parra «Volver a los 17» el compás musical se impone sobre la acentuación natural, prosódicaprosodiaDisciplina que se ocupa de las unidades que en el verso están sujetas a una mayor organización que en la prosa (acento, cantidad, etc.) Es una rama de la Teoría del Verso.Pojem ve slovníku, de manera que el acento aparece en lugares donde no lo esperaríamos. Podemos observar algo parecido también en algunas canciones checas:

tr vane pouští,
Po písku žene klobouk,
zahnal ho do houští,
starý a černý klobouk.

(Werich, Voskovec, Ježek)

Modelos de análisis del ritmo acentual español

Más arriba operamos con los conceptos de pies anfibráquicos, yámbicos, etc. Ahora es el momento de hacer un resumen de la terminología empleada en el análisis del ritmo acentual y confrontarlo con algunas teorías métricas españolas.

  • Los pies de dos tiempos son el troqueotroqueoPie de dos tiempos; en el silabotonismo consiste en la sucesión de sílabas tónica, átona; en la versificación cuantitativa: larga, breve.Pojem ve slovníku (–U) y el yamboyamboPie de dos tiempos; en el silabotonismo consiste en la sucesión de sílabas átona, tónica; en la versificación cuantitativa: breve, larga.Pojem ve slovníku (U–).
  • Los pies de tres tiempos son el dáctilodáctiloPie de tres tiempos; en el silabotonismo consiste en la sucesión de sílabas tónica, átona, átona; en la versificación cuantitativa: larga, breve, breve.Pojem ve slovníku (–UU), anfíbracoanfíbracoPie de tres tiempos; en el silabotonismo consiste en la sucesión de sílabas átona, tónica, átona; en la versificación cuantitativa: breve, larga, breve.Pojem ve slovníku (U–U) y anapestoanapestoPie de tres tiempos; en el silabotonismo consiste en la sucesión de sílabas átona, átona, tónica; en la versificación cuantitativa: breve, breve, larga.Pojem ve slovníku (UU–).

En el marco de la versificación silabotónica está todo claro. Pues si el metro es por ejemplo yámbico, las sílabas tónicas suelen ser las pares2:

Con mi llorar las piedras enternecen
su natural dureza y la quebrantan;
los árboles parece que se inclinan;
las aves que me escuchan, cuando cantan,
con diferente voz se condolecen
y mi morir cantando me adevinan.

(Garcilaso de la Vega; citado por Domínguez Caparrós 1993: 88)Domínguez Caparrós, José (1993), Métrica española, Madrid, Síntesis.

En este ejemplo de la «Égloga I» de Garcilaso vemos que efectivamente solo las sílabas pares llevan acento, pero no todas. Es normal que en la versificación silabotónica no todos los tiempos fuertes se realicen, porque su ritmo sería monótono. Sin embargo, si el recitador elige como ejemplo de verso la ejecución en forma de escansiónescansiónDeclamación estilizada de manera que el verso se divide en sus elementos (por ejemplo, sílabas tónicas y átonas) y esta división se destaca en voz alta.Pojem ve slovníku, puede acentuar todas las sílabas pares y poner de relieve el esquema yámbico («Con mi llorar las piedras enternecen»). La escansión es característica en coplas infantiles; un típico ejemplo checo:

Entenky dva špaky
Čert vyletěl z elektriky…

La escansión trocaicatroqueoPie de dos tiempos; en el silabotonismo consiste en la sucesión de sílabas tónica, átona; en la versificación cuantitativa: larga, breve.Pojem ve slovníku de esta cancioncilla (destacada, además, por el canto) acentúa algunas sílabas que normalmente no llevarían acento.

También en un poema más bien silábico, donde el único principio organizador es el número de sílabas, percibimos el ritmo acentual, pero lo que lo diferencia del silabotónico es que su distribución de acentos no se somete a una organización dictada por el metro. El ritmo entonces varía, como podemos ver en el siguiente ejemplo:

1. La palma acaricia el pino,
2. con este aire de agua
3. en aquel, el pino, pino
4. acariciaba a la palma.
5. Y la noche azul y verde
6. es noche verde y morada
(…)
2, 5, 7
2, 4, 7
3, 5, 7
4, 7
3, 5, 7
1, 2, 4, 7

(Juan Ramón Jiménez; citado por Domínguez Caparrós 1993: 98)Domínguez Caparrós, José (1993), Métrica española, Madrid, Síntesis.

Por lo tanto, se ve que el ritmo acentual no sigue ningún esquema regular: cada renglón representa un ejemplo de verso distinto desde el punto de vista acentual, son diferentes variedades estilísticas del octosílabooctosílaboVerso de ocho sílabas.Pojem ve slovníku. Una variación como esta se percibiría como arrítmica en la versificación silabotónica, pero no así en la versificación silábica del español.

En el silabismo también podemos denominar los versos según el tipo de pie que los compone, teniendo en cuenta que los versos que combinan varios pies se llaman mixtos. De esta manera, el verso 1 es mixto (U–U U–U –U); el 2 es también mixto, pero combinando pies diferentes que el 1 (U–U –UU –U); el 3 y el 5 son trocaicos con el primer tiempo fuerte no realizado (UU –U –U –U); el 4 es dactílico con el primer tiempo fuerte no realizado (UUU –UU –U); pero el verso 6, que tiene acentuada tanto la primera como la segunda sílaba, puede ser dactílico o mixto: no hay manera de decidir, porque el ritmo del poema entero es mixto (combina variedades), silábico. En este caso, además, tampoco podemos calificar uno de los dos acentos como antirrítmicos; solo sería posible si lo calificáramos dentro del contexto dactílico (pues el acento en la sílaba 2 sería antirrítmico) o dentro del contexto de un poema cuyo ritmo fuera mixto de tipo 2, 4, 7 y todos los versos correspondieran a este esquema (en tal caso sería antirrítmico el acento en la sílaba 1). En el sistema versificatorio silábico, por tanto, no funciona mucho la mencionada clasificación de acentos.

Si echamos un vistazo a la historia de la métrica española, veremos que la terminología que nos sirve para denominar los tipos de pie y los ritmos acentuales no es la única. Existen otros modelos de análisis que se denominan según sus defensores. El que acabamos de presentar lo consideramos útil no solo por su claridad, sino también por la posiblidad de compararlo: los nombres de los pies reflejan la terminología empleada en el sistema cuantitativoversificación cuantitativaSistema de versificación que se basa en la cantidad de la sílaba (oposición larga/breve). Aparece por ejemplo en el verso clásico griego y latino.Pojem ve slovníku grecolatino y se utilizan también en las teorías del verso de otras culturas (por ejemplo, la versología estructuralista checa usa las mismas denominaciones). En la métrica española, este modelo coincide con el de Andrés Bello. (Domínguez Caparrós 1993: 88-90)Domínguez Caparrós, José (1993), Métrica española, Madrid, Síntesis.

Otro sistema es el de Tomás Navarro Tomás. Este autor propone analizar el ritmo del verso de la misma manera que el compás de la música; por lo tanto, su modelo se denomina también «musical». Consiste en dividir el verso en: el período rítmico, que va desde la primera sílaba acentuada del verso hasta la que precede a la última sílaba acentuada y el período de enlace, que comprende todo el resto del verso desde la última sílaba acentuada, más el principio del verso siguiente hasta su primer acento. Las sílabas átonas al principio de cada verso (hasta la primera tónica) están en la llamada anacrusis. Se distinguen solo el ritmo trocaicotroqueoPie de dos tiempos; en el silabotonismo consiste en la sucesión de sílabas tónica, átona; en la versificación cuantitativa: larga, breve.Pojem ve slovníku y el dactílicodáctiloPie de tres tiempos; en el silabotonismo consiste en la sucesión de sílabas tónica, átona, átona; en la versificación cuantitativa: larga, breve, breve.Pojem ve slovníku. El modelo de Navarro Tomás tiene como consecuencia una confusión terminológica, como veremos.

Tomemos como ejemplo un verso de la ya citada «Égloga I»: Con mi llorar las piedras enternecen. Según Andrés Bello, su ritmo sería yámbicoyamboPie de dos tiempos; en el silabotonismo consiste en la sucesión de sílabas átona, tónica; en la versificación cuantitativa: breve, larga.Pojem ve slovníku, aunque no con todos los acentos realizados, pero, en la nomenclatura de Navarro Tomás, sería trocaico: Con mi llo- está en anacrusis y -rar las piedras enter- es el período rítmico trocaicotroqueoPie de dos tiempos; en el silabotonismo consiste en la sucesión de sílabas tónica, átona; en la versificación cuantitativa: larga, breve.Pojem ve slovníku (–U –U UU –U).3

El hispanista checo Oldřich Bělič critica la concepción de Navarro Tomás:

El verso es, ex definitione, una unidad rítmica: ¿cómo es posible, entonces, dejar una parte de él fuera del ritmo? Consideremos el verso siguiente de Gabriela Mistral que cita el propio T. Navarro para ilustrar su teoría:

Dancemos en tierra chilena

Este verso, con toda evidencia, forma una unidad sintáctica, semántica y rítmica (el ritmo es anfibráquico, los pies coinciden con palabras y grupos de intensidad):

U–U / U–U / U–U.4

Es, pues, una triple unidad, perfectamente armónica y, al parecer, indivisible. Pero según T. Navarro, la primera sílaba (Dan) debe quedar separada rítmicamente del verso, ya que el ritmo de éste empieza sólo con el primer apoyo (ce). Pero, ¿qué sentido tiene disecar el verso de este modo?

(Bělič 1999: 116)Bělič, Oldřich (1999), Verso español y verso europeo, Santafé de Bogotá, Instituto Caro y Cuervo.

Y más abajo añade el mismo autor:

Hemos dicho que la etimología de la palabra «anacrusis» remite a la música. Pero la analogía del ritmo poético con el musical, en este punto, no deja de ser problemática. En la música, el antecompás tiene existencia real y forma parte del ritmo (en la repetición de una frase musical se integra en la secuencia de los compases). Pero en la poesía no hay ningún «da capo al coda» o «al fine».

(Bělič 1999: 117)Bělič, Oldřich (1999), Verso español y verso europeo, Santafé de Bogotá, Instituto Caro y Cuervo.

Otro modelo de análisis del ritmo acentual, denominado «binario», es el de Rafael de Balbín. Parte de la última sílaba acentuada y, según esta, se decide el carácter del ritmo: si el último acento lo ocupa la sílaba par, el ritmo es yámbico; si es una sílaba impar, es trocaico. Lo que pasa es que el sistema no considera los ritmos ternarios: dactílicos, anfibráquicos y anapésticos. Todos los acentos fuera de la sílaba par (en yambo) o impar (en troqueo) no son rítmicos, según esta concepción. (Domínguez Caparrós 1993: 91-92)Domínguez Caparrós, José (1993), Métrica española, Madrid, Síntesis.

Para finalizar este capítulo, comparemos brevemente lo expuesto con la misma problemática en el verso checo: el acento checo cae normalmente en la primera sílaba de las palabras de más de una sílaba (los monosílabos los dejamos aparte); únicamente la preposición primaria monosilábica toma el acento de la siguiente palabra (na cestě). Los límites entre los pies, por tanto, coinciden con las fronteras entre palabras mucho más frecuentemente que en el verso español. Además, en el verso checo no hay sinalefas, sinéresis ni elisiones; todas las vocales se separan mediante una oclusión.

El verso checo se sirve de diferentes ritmos de pies. Los versólogos checos actualmente distinguen entre el troqueo, el yambo y el dáctilo; el anapesto no es posible en el checo (por la naturaleza de su acento) y el anfíbraco se suele considerar como dáctilo con anacrusis. (Ibrahim – Plecháč – Říha 2013: 29)Ibrahim, Robert – Plecháč, Petr – Říha, Jakub (2013), Úvod do teorie verše, Praga, Akropolis. Sin embargo, al igual que en la métrica española, los diferentes estudiosos emplean diferentes métodos de análisis, así que la problemática queda todavía bastante confusa.

1 Según lo expuesto parece que hemos caído en un círculo vicioso: ¿por qué son antirrítmicos los acentos en las palabras ya y oro, si los hemos quitado mediante la licencia de desacentuación? Hay que mirar lo dicho desde la perspectiva de la teoría de Roman Jakobson de la que hablamos en el capítulo dedicado al metro y al ritmo: tengamos en cuenta que el poema «Marcha Triunfal» tiene el metro silabotónico anfibráquicoanfíbracoPie de tres tiempos; en el silabotonismo consiste en la sucesión de sílabas átona, tónica, átona; en la versificación cuantitativa: breve, larga, breve.Pojem ve slovníku; su metro o modelo de versomodelo de versoUno de los cuatro conceptos de Roman Jakobson (modelo de verso, ejemplo de verso, modelo de ejecución, ejemplo de ejecución). El modelo de verso es una norma métrica, un esquema.Pojem ve slovníku es anfibráquico; el ejemplo de verso como realización concreta va contra ese esquema empleando las palabras con acentos antirrítmicos; el lector o recitador tiene cierta idea de cómo leer esos versos, pues si sabe que son anfibráquicos (modelo de ejecuciónmodelo de ejecuciónUno de los cuatro conceptos de Roman Jakobson (modelo de verso, ejemplo de verso, modelo de ejecución, ejemplo de ejecución). Es la idea que tiene el lector o recitador sobre cómo interpretar el verso. Del modelo de ejecución depende el ejemplo de ejecución (los dos conceptos se dan en el nivel de la recepción).Pojem ve slovníku), los lee como tales y en este caso desacentúa las palabras en cuestión o va contra la norma anfibráquica optando por la pronunciación «natural»; la cuestión es que puede elegir el ejemplo de ejecución dependiendo de sus fines estéticos.

2 Otra vez recordamos: el acento está en las pares si el poeta quiere cumplir con el modelo de verso; si opta por violentar la norma y acentuar alguna sílaba impar, no merece la horca, sino que presenta un ejemplo de verso con cierta variación rítmica.

3 Para completar, diremos todavía que el período rítmico que mezcla los pies de tres tiempos (dáctilos) con los de dos tiempos (troqueos) es, según Navarro Tomás, mixto.

4 Bělič (1999)Bělič, Oldřich (1999), Verso español y verso europeo, Santafé de Bogotá, Instituto Caro y Cuervo. emplea un sistema de signos diferente. En este lugar aplicamos el nuestro.


Ejercicios


Ejercicio 1

El siguiente fragmento, ¿es silábico o silabotónico (de cláusulas)? ¿Por qué?

En el Parnaso leyeron
tus versos disparatados,
y por buenos y acertados
casi todos los tuvieron.
Algunos contradijeron
niñerías de esta clase,
y para que no pasase
adelante aquel rumor
la música en tu favor
hizo que Apolo exclamase.

(Félix María de Samaniego)

1)


El poema se basa en el sistema silábico, porque no está regularizada la presencia del acento en sílabas concretas, aparte de la penúltima. En el primer verso están acentuadas las sílabas cuarta y séptima; en el segundo, segunda y séptima; en el tercero, tercera y séptima, etc.


Ejercicio 2

El siguiente poema silabótonico está compuesto a partir de la sucesión regular de pies (cláusulas). ¿Cuáles son?

En el tercer verso, ¿qué licencia aplicamos para que la palabra nueva se ajuste al eje métrico?

El acento en la palabra nueva, ¿es rítmico, extrarrítmico o antirrítmico según la clasificación tradicional?

Sale la aurora risueña de flores vestida,
dándole al cielo y al campo variado color;
todo se anima sintiendo brotar nueva vida,
cantan las aves, y el aura suspira de amor.

(Gertrudis Gómez de Avellaneda)

Pies:






Licencia en el tercer verso:






Acento en la palabra nueva:





Ejercicio 3

En el siguiente trozo del romance de La vida es sueño, identifica el ritmo acentual de los versos:

Segismundo	Primero, tirano dueño,         2, 5, 7, mixto
		que los ofendas y agravies,    4, 7, dactílico sin 1er acento realizado
		se mi vida despojo           2, 4, 7, mixto
		destos lazos miserables;       1, 3, 7, trocaico sin 5o acento realizado
		(...)

(Cernuda, „Un español habla de su tierra“)


Ejercicio 4

El verso La esperanza nos llama a poner nuestra voz en el coro de José María Valverde tiene el ritmo acentual regular. ¿Cuál sería su ritmo según la concepción de a) Andrés Bello, b) Tomás Navarro Tomás, c) Rafael Balbín?

Andrés Bello:






Tomás Navarro Tomás:



Rafael Balbín: